Festival de la Manzana de Villaviciosa

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Mapa de situación del concejo

Mapa de situación del concejo de Villaviciosa. Asturias.

Escudo del concejo

Escudo del concejo de Villaviciosa. Asturias.

Descripción

Fiesta declarada de Interés Turístico Regional.

De carácter bienal se celebra los años impares.

El primer fin de semana más próximo al puente del 12 de octubre.

En el año 1960 tuvo lugar por primera vez este festival, que viene celebrándose todos los años coincidiendo con la cosecha de la manzana y las fiestas patronales y en el que se maya el primer mosto de sidra del año ofreciéndoselo a Nuestra Señora del Portal.

Destacan la exposición de la manzana selecta de sidra y mesa, con la entrega a los ganadores de manzanas de oro, plata y bronce, el Concurso de Escanciadores de Sidra y el nombramiento de Caballeros Defensores de la Manzana y de la Sidra.

Fiesta también de carácter gastronómico, que tiene como principales ingredientes los inmejorables productos de la ría, el mar, el monte y la huerta.

Los actos comienzan con la destilación y ofrecimiento del primero mosto en la plaza principal de esta villa, ante la imagen de la Virgen.

Se efectúa la ofrenda dela primera manzana cosechada y a continuación, en un lagar instalado al aire libre, se produce la transformación del fruto en mosto, que es ofrecido nuevamente a la Virgen.

Posteriormente tiene lugar la danza de la Salve de gracias a la Virgen —de gran belleza—, un desfile de carrozas y una espicha (fiesta típica de un lagar donde se prueba la sidra, acompañada de pinchos de tortilla, huevos cocidos, lacón, etc.).

Festival de la Manzana de Villaviciosa

Al comienzo de la década de los sesenta, Asturias era la primera productora de España de manzana.

La conveniencia de crear un clima favorable a la expansión de la manzana y su industria transformadora trajo consigo la idea de crear el Festival de la Manzana en Villaviciosa, ya que si Asturias era la primera productora de manzana sidrera, Villaviciosa es el concejo que más produce de Asturias y en el que está ubicada la antigua Estación Pomológica, actual SERIDA, considerado entre los más importantes en el campo de la investigación agroalimentaria.

En septiembre de 1960, el ingeniero Sergio Álvarez Requejo, creador e impulsor del Festival de la Manzana, inspirado en el Apple Blossom de Yakima (Washington), inicia con éxito y con carácter bienal el primero de los festivales en Villaviciosa.

Los aspectos que más definen el Festival y que mejor lo caracterizan son el acto Literario Musical, por el cual se anuncia el Festival y son presentadas las reinas, y la exposición provincial de manzana selecta, que fomenta el cultivo del manzano mediante la exposición-concurso, premiándose a los mejores con las manzanas de oro, plata y bronce.

Coincidiendo con la exposición, se reparte abundante información a los productores, se imparten conferencias y se realizan proyecciones sobre el tema de la manzana.

En la misma muestra, los industriales de la provincia exponen sus productos derivados de la manzana.

Otros actos de interés vinculados al mismo Festival son:

la exposición de maquinaria agrícola y productos para el campo;
la elaboración en la plaza del Ayuntamiento del primer mosto de sidra y su ofrenda a la Virgen del Portal;
el desfile de grupos folclóricos, de bandas de música y carrozas alusivas a la manzana y la sidra;
el tradicional Concurso de Escanciadores de Sidra, en el que compiten echadores venidos de toda Asturias;
la toma de juramento a los nuevos Caballeros Defensores de la Manzana y de la Sidra, nombrados por el Gran Consejo de la Manzana y de la Sidra. Antes de que el Gran Maestre les dé el espaldarazo y les entregue los atributos propios de la Orden, el Maestre Portavoz les toma juramento tras leer la fórmula de investidura que comienza así:

En nombre del Señor
que hizo toda cosa
y puso el señuelo
de la poma olorosa
para probar el temple
de la progenie humana
que claudicó, impotente,
ante la impar manzana.
En nombre del Señor
que, benévolo, quiso
dar al hombre caído
un nuevo Paraíso,
perdonar su pecado,
remediar sus penurias,
crear un nuevo Edén
en la fértil Asturias...

Siete son los caballeros que se arman en cada ceremonia y que corresponden a personas que más se hayan distinguido por su quehacer en favor de la manzana y la sidra.

La Gran Espicha final, que fue calificada como la puesta de largo de la sidra, y donde ésta es festejada con carácter popular y multitudinario.

El Festival de la Manzana, organizado inicialmente por la Estación Pomológica, lo es ahora por la Comisión Municipal de Festejos y cuenta con la colaboración de los industriales de la sidra y productos derivados de la manzana.

(Fuente: Miguel Á. González Pereda, revista Cubera.)

Concejo de Villaviciosa

Pumaradas y sidra, huerta y mar, Rodiles y Tazones, Románico en Amandi y Prerrománico en Valdediós, el casco histórico de Villaviciosa, surf, pesca y aves en la mayor ría de Asturias… Así es Villaviciosa, Capital Manzanera de España.

Los concejos (municipios) que limitan con el Concejo de Villaviciosa son: Cabranes, Colunga, Gijón, Piloña y Sariego. Cada uno de estos concejos (municipios) comparte fronteras geográficas con Villaviciosa, lo que implica que comparten límites territoriales y pueden tener interacciones políticas, sociales y económicas entre ellos.

Comarca de la Sidra

Tierra de pomaradas y manzanos en flor, hogar de centenarios llagares de sidra, costa de dinosaurios, pueblos mineros y villas marineras, una de las rías con más biodiversidad de toda Asturias, majestuosas sierras como las de Peñamayor o el Sueve, Caminos de Santiago, pueblos ejemplares y el mejor arroz con leche… así es la Comarca de la Sidra.

La comarca está conformada por uno o varios concejos (municipios). En este caso: Bimenes, Cabranes, Colunga, Nava, Sariego y Villaviciosa. Los concejos representan las divisiones administrativas dentro de la comarca y son responsables de la gestión de los asuntos locales en cada municipio.

Conocer Asturias

«La preparación de la fabada asturiana es todo un arte. Comienza con la selección de las mejores fabas, que deben ser de tamaño grande, suaves y tiernas. Estas fabas se dejan en remojo durante toda la noche para ablandarlas y facilitar su cocción. Al día siguiente, se cocinan las fabas en una pota grande junto con el chorizo, la morcilla, la panceta y, a veces, el lacón o el tocino. La cocción lenta y prolongada es fundamental para que los sabores se mezclen y se desarrollen plenamente.»